domingo, 30 de octubre de 2011

Caras de Tlatelolco octubre de 2011


Fernando Olín, director de la Crónica de Tlatelolco,
surgió en abril de 1969 que "salía cuando Dios quería"
 

Leidy Molleda: Ayudemos a recatar Tlatelolco
 del abandono en que se encuentra...
 

Profr. Joel Islas: "Es bonito vivir aqui, existe un gran respeto entre jubilados
 y vmos con tristeza que tenemos que partir" Jubilado de Wilfrido Massiu.


Martí Batres en la huella del edificio Nuevo León

Alumnos de la Universidad de la Ciudad de México en
PH del Edificio Veracruz


Ricardo Romero: "Estamos trabajando por la segunda temporada
 de Tlatelolco web TV espéralo y apóyanos. "Eterna vida al high energy"

Berenice: Una michoacana viviendo en Tlatelolco y estudiando historia.

Juan Teran: "Me gustaría ver a Tlatelolco como nació,
 lleno de flores".


Ofrenda de Vivir en Tlatelolco

jueves, 27 de octubre de 2011

Calaca del equipo Vivir en Tlatelolco

martes, 25 de octubre de 2011

Imágenes octubre de 2011

Avances en la remodelación de la Torre Insignia de Tlatelolco.estará lista a fin de año

Cartel Ciclo de Conferencias

Continuan pernoctando indigentes en el Eje Central y Flores Magón  ante la indifrencia de las autoridades.

La Federación de Estudiantes Revolucionarios en la Plaza de la Tres Culturas

La Procuraduría Social en la Plaza de las Tres Culturas

Obras en la primera sección para colocar tubería  para riego con agua tratada para las áreas verdes

En lo estudios que realiza la Delegación Cuauhtémoc rompió una varilla de una columna en el Edificio José María Arteaga en Tlatelolco

domingo, 23 de octubre de 2011

Jacaranda. Árbol que da belleza a Tlatelolco

Jacaranda mimosifolia

I.A. Minerva Chávez Germán

Árbol subtropical originario de Sudamérica ampliamente extendido a causa de sus bellas y duraderas flores azules. La copa de la jacarandá tiene forma de una sombrilla, El tallo principal tiene una forma algo torcida. El tronco tiene una altura de 6 a 9 m y un diámetro de 40 a 70 cm. La corteza es de color pardo grisáceo y de áspera, fisurada y oscura con la edad, forma escamas rectangulares que se pueden desprender. La jacarandá alcanza 8 a 12 m de altura, de crecimiento medio y puede vivir más de 100 años.



Jacaranda

Flores en racimos muy vistosos de color azul-violeta, florece en mayo y junio, Fruto, parece una castañuela grande.

Es un árbol que por su belleza se utiliza mucho en las ciudades, resiste la contaminación, por ser su origen trópical requiere de mucha agua, sobre todo en sus primeros años, no le gusta el frío pero si le gusta estar en lugares asoleados.aparentemente no la afectan plagas. No se recomienda plantarlo cerca de las casas ya que sus raices pueden afectar los cimientos.




sábado, 22 de octubre de 2011

¿Qué tipo de policía requiere nuestra Unidad Tlatelolco?

Raúl de la Torre

Antes de responder, concedamos que la seguridad no la dan los guardianes, sino el poder mirar al vecino, como a uno mismo. Se requiere también, claro está, la fuerza pública, para prevenir y perseguir el delito; y ésta debe funcionar conforme al medio que tutela. ¿Qué características deberá tener, la que custodia Nonoalco y Tlaltelolco?

La policía en las diversas épocas de esta Unidad, ha pecado unas veces de arbitraria, y otras de permisiva; pero siempre ha padecido de insuficiencia para conocer –intuir, caracterizar-, al tipo de gente que aquí habita, lo que ha limitado su acción.

Sobre todo, no ha descubierto la máscara de mucha gente en la Unidad, de creerse “importante, decente, y socialmente superior”; que les permite en su caso, delinquir sin sospecha -¡¿cómo, si son finos y cultos?!-, o cometer faltas cívicas amparados en tal disfraz (inhibiendo el actuar del uniformado, con agresiones de clase social, que a menudo logran su propósito).

La policía en este Nonoalco y Tlaltelolco, deberá entonces comprender, que se enfrenta a infractores y delincuentes –de aquí mismo, no de “los mugrosos de la Guerrero” según expresan- totalmente “decentes, cultos y pudientes” –dicen ellos- ; que para quedar impunes, ofenden al uniformado, desde la “superioridad social”.

Reconocido ello, y sin ceñirla a un estricto ámbito operativo – sólo preventiva, o judicial, o ministerial-, debería cumplir funciones relativas a varios de esos ámbitos; dada la naturaleza de nuestra Unidad:

¿Está es la policía que necesitamos?
1) Considerar sobre todo, que su función de otorgar seguridad, consiste en fomentar la confianza y ayuda mutua entre los vecinos.

2) Ser una policía preventiva del conflicto vecinal, oyendo y conociendo estos conflictos, para proponer soluciones.
3) Estudiar junto con los residentes, las formas de prevenir y enfrentar el delito, en forma conjunta.
4) Poder presentar no sólo presuntos delincuentes ante el MP, sino presuntos infractores –escandalosos, motociclistas, etc- ante el juez cívico.
5) Poder en ciertos casos de escándalo, narcotráfico, insalubridad por animales, penetrar a los domicilios, sin orden judicial, y sólo con permiso de los vecinos inmediatos, para cesar la anomalía.
¿Qué piensa usted, estimado lector...?

viernes, 21 de octubre de 2011

Memorias de la construcción y reconstrucción: Estudios de la Delegación Cuauhtémoc en Tlatelolco

Por Santiago Jordá Salazar

En esta ocasión, después de darles un afectuoso saludo, les informo, que haré un paréntesis en la narrativa debido a los actuales acontecimientos que nos presenta la Delegación Cuauhtémoc, debido a los estudios que está haciendo en la Unidad y que están causando inquietud en los vecinos de 21 edificios que pasaron a la segunda etapa; porque según la delegación de buenas a primeras dice que están en riesgo.

Para realizar estos estudios tiene un presupuesto, que tiene que gastar, de 25 millones de pesos según nos han informado servidores públicos en varias juntas informativas en donde manifiestan su total desconocimiento sobre la reconstrucción y el estado actual de la Unidad.

Han dicho que no existen planos, ni estudios de la construcción y la reconstrucción a pesar de que se entregaron a la delegación entre otras autoridades, planos y estudios por edificio; prueba de ello es que otorgaron licencias tanto de construcción, terminación y ocupación como consta en las placas que existen en cada edificio.


Estos estudios se harán en tres etapas, actualmente nos encontramos en la segunda que consta de estudios de mecánica de suelos en el perímetro de los edificios en riesgo. Ya en la primera etapa se hicieron los estudios topográficos para medir la inclinación de los mismos con respecto a la vertical. Sin tomar en cuenta que todos los edificios se fortificaron, no se reconstruyeron, puesto que ninguno se derrumbó, esta fortificación se realizó con las inclinaciones que tenían en mayo de 1986.

Los inmuebles se estabilizaron con el aumento de área de de cimentación como parte importante de esta fortificación de la estructura. Los edificios que se encuentran en esta etapa, están siendo objeto de otros estudios como son la toma de corazones de concreto para aplastarlos con una prensa hidráulica para medir su resistencia diciendo que utilizaran “pachómetro” que es un detector de metales y se utiliza para no cortar varillas, pues esto si debilitaría la estructura. Ya que esa varilla cortada quedaría como si nunca se hubiera colocado.
Los inmuebles se estabilizaron con el aumento de área de de cimentación como parte importante de esta fortificación de la estructura. Los edificios que se encuentran en esta etapa, están siendo objeto de otros estudios como son la toma de corazones de concreto para aplastarlos con una prensa hidráulica para medir su resistencia diciendo que utilizaran como si nunca se hubiera colocado.

¿Para qué lo hacen? Si se cuenta con los resultados del laboratorio de las concreteras que surtieron el concreto en su momento y resultaron positivas a los 28 días de colocado como marca el reglamento de construcción vigente.


Otro ejemplo de lo absurdo, se presentó, a verme hasta el piso 21 del edificio Veracruz, un joven ingeniero fatigado; porque el elevador no sirve, para pedirme que lo dejara hacer un levantamiento de mi departamento porque la delegación no les dió planos, ni nada del edificio. Entonces, me pregunto: ¿Cómo y que cotizaron?, ¿La delegación qué y cómo otorgó los contratos?; a este ingeniero le regalé un plano arquitectónico y estructural reducido del edificio y dándome las gracias se retiró.



En esta ocasión, empezaré a publicar documentos oficiales que tengo por este medio. Espero que al compartirlos con ustedes no se dejen sorprender por servidores públicos sin ética. Discúlpenme estoy molesto y enojado gracias y hasta la próxima; si puedo y me dejan.

Nota: Como primera ocasión les presento los croquis de cuatro edificios tipo “C”, en donde se hace constar las inclinaciones que tenían los edificios en mayo de 1986 y sirvieron de base para la fortificación de estos; que se realizó a reventón. Esto es, respetando dichas inclinaciones y no nivelando con la vertical de los edificios, como debe de ser. 

jueves, 20 de octubre de 2011

Unidad Tlatelolco y el curso de los años



Por Adrián Arellano Mora


e

l curso de Historias de la Vida Cotidiana: Memoria y Fotografía, significó una gran ocasión para que un grupo de vecinos recordaran la época dorada de la Unidad Tlatelolco, ciudad planificada por el polémico Arq. Mario Pani; de sus bellos, novedosos y originales multifamiliares, de sus murales como el de Chávez Morado, Siqueiros y Carlos Mérida, elementos que conformaron una ciudad de ensueño no tan sólo para sus residentes sino también para los habitantes de la Ciudad de México.


Desde su inauguración la afamada Plaza de las Tres Culturas, pronto se convirtió en un destino obligado para el turismo nacional e internacional; donde próximamente en la zona arqueológica se dará a conocer al público la milenaria Caja de Agua, vestigio novohispano.

Justamente en esta Plaza, lamentablemente los sucesos del 2 de octubre del ’68 impactó seriamente la vida interna de sus residentes. Como lo fue también el memorable sismo del ’85, que pese a la incertidumbre de las condiciones de ocupación de los edificios, se logró por medio de su organización vecinal el victorioso Programa de Reconstrucción Democrática.

Cabe mencionar, que aquí vivieron personajes de la política nacional, entre otros: Valentín Campa; líder del movimiento ferrocarrilero, César del Ángel; representante de la organización de los 400 pueblos, y Sergio Alcázar; asesor del movimiento urbano popular.

En el ámbito del mundo de la farándula, podemos mencionar a: “El Chato Padilla”, Consuelo Duval, Johnny Laboriel, Leticia Perdigón, Harry Geithner, los cuates del Pollymarch, los Bichir y el novel Michael Ronda; quien participa en la película sobre el movimiento estudiantil del ’68 titulado “Tlatelolco”, del cineasta Carlos Bolado.

Este curso, se enriqueció con la interesante y amena entrevista con el Arq. Santiago Jordá; en el cual expresó que Tlatelolco existe gracias a la presencia de Fidel Castro y su Revolución Cubana. Y la forma de contrarrestar tal influencia, los Estados Unidos implementó el conocido programa de ayuda económica y social la Alianza para el Progreso, ALPRO.

Además, en la conferencia con el urbanista y catedrático Ángel Mercado manifestó ante los asistentes una inquietante interrogante: ¿cuál será el futuro de esta ciudad modelo que representa Tlatelolco en los ya 50 próximos años?.

Muchos tlatelolcas han sido testigos de los cambios de su imagen urbana y arquitectónica; de la fachada de sus escuelas, de los hospitales, de los centros deportivos, de los juegos infantiles, de los andadores antes iluminados, y que decir, de los inolvidables llamados cuadros, verdaderos sitios de encuentro y convivencia vecinal.

Aunque en el fondo se añora y suspira por el Tlatelolco de los ‘60s, siempre se mantendrá la esperanza que a través del tiempo esta unidad habitacional nunca pierda su gran hechizo.

Este taller, mismo que tuvo una duración de 3 meses, fue convocado por el Centro Cultural Universitario Tlatelolco-UNAM y coordinado por los historiadores argentinos: Melina Alzogaray y Genaro Recabarren.

Para efectos académicos, se donó por quien suscribe, al CCUT-UNAM el compendio de la revista Vivir en Tlatelolco/2007-2011; así como, la publicación Ocelote Tlatelolca /1 al 8, y de notas periodísticas publicadas en distintos diarios nacionales/1985-2011.

Es gratificante saber que este tipo de cursos es el inicio de otros más con el propósito de conocer y entender el Tlatelolco de hoy, en voz de sus residentes.

miércoles, 19 de octubre de 2011

Por fin dieron el "si" a la modificación del acceso a la estación Manuel González del Metrobús

Después de ocho meses de gestiones de un grupo de vecinos de la primera sección encabezados por Margarita Pineda han solicitado sea modificado el acceso a la estación Manuel González del Metrobús de la linea 1 en avenida Insurgentes para hacerla accesible por medio de rampas.

Estación Manuel González del Metrobús

En un escrito dirigido a Margarita Pineda Acevedo, con fecha 10 de octubre pasado, el Ing. Hugo Flores Sánchez director general de proyecto Metrobús, señala lo siguiente:

"Hago de su conocimiento que al final de cada año fiscal las dependencias elaboran su Programa Anual de Obras, requiriendo los recursos necesarios, para la autorización en el siguiente año, por lo que el proyecto de accesibilidad para la Estación "Manuel González" de linea 1 del Metrobús, será incluida en dicho programa."

Estaremos atentos a ver como construyen estas rampas tan necesarias para los vecinos de Tlatelolco de la tercera edad o con alguna discapacidad.

martes, 18 de octubre de 2011

Arq. Guillermo Mitre Arrollo: "El edificio Nuevo León se cayó por falta de mantenimiento"

Por Antonio Fonseca

Arquitecto Guillermo Mitre Arrollo egresado de la UNAM, participó en el peritaje de todos los edificios de la Unidad y también en la reforzamiento de algunos edificios de la Unidad Tlatelolco después de los sismos de 1985. Nos encontramos en una cafetería cercana a la Unidad y más tarde se integró a la plática el Arq. Santiago Jordá, ambos ya se conocían, fue un encuentro cordial

Arqw. Guillermo Mitre Arrollo
P. ¿Dónde te encontrabas cuando ocurrió el terremoto de 1985?

R. Me encontraba estudiando una maestría en urbanismo, en la ciudad de Chicago; las primeras noticias eran que la ciudad de México había desaparecido. Fue hasta las 11 ó 12 de la mañana que se señalaba que se requerían personas con conocimientos de alpinismo, paramédicos, etc. Después llegan las primeras trasmisiones de Jacobo Zabludovsky, e inmediatamente busqué la manera de regresar a México, lo hice al día siguiente; en el mismo vuelo venía Placido Domingo, platicamos en el camino a México y decidí venir a Tlatelolco. Esa tarde estábamos subiendo cuerdas en el Edificio Nuevo León y ahí fue donde vivimos el sismo del día 20 de septiembre cerca de las 8 de la noche. Mis vivencias ahí fueron muy fuertes y me cuesta trabajo hablar de todo lo que vivimos ahí dentro.

¿Participaste en los peritajes?

Me integre al programa por instrucciones de Ing. Félix Manuel Fornaguera el 30 de octubre de 1985. Me toco coordinar los peritajes en Tlatelolco, empezando por el Nuevo León, en una empresa con Hilario Prieto; asesorados por el RDO* Javier Vertíz, Mario Vadillo y Heberto Castillo; este último fue un destacado político y también un excelente estructuralista. Todos ellos, excelentes estructuralistas.

¿Por qué se cayó el Edificio Nuevo León?

El Nuevo León se cayó por falta de mantenimiento, la capa de compresión de la cimentación se desprendió el cascarón por el exceso de humedad en las celdas de cimentación; y la humedad oxidó a las varillas y las debilitó de manera muy importante en 30 ó 40 %. ¡La restructuración era urgentísima…! El edificio fue diseñado para alojar 288 familias y no para tener una ciudad perdida encima. Un punto medular fueron las azoteas que estaban habitadas, vivían más personas ahí que en los departamentos; este era el caso, por igual, que se manifestó en el edificio Tamaulipas; donde extendieron los techos con láminas en las azoteas y colocaban literas y otros muebles por todos lados. Eran verdaderas “ciudades perdidas”.

Otros edificios que se colapsaron por falta de mantenimiento fueron: Churubusco y Guelatao; con inclinaciones importantes en alguna de las losas, estaban muy inclinadas, hasta 20 cm. También colapsaron la torre 20 de Noviembre y Atizapán; porque tenían columnas fracturadas, al igual que los edificios Ponciano Arriaga, Ignacio Comonfort, Jesús Terán, e Ignacio Manuel Altamirano. Todos estos fueron demolidos.

¿En qué edificios de la Unidad participaste para su reforzamiento?

Participé en el reforzamiento de los edificios: 10 del ISSSTE, Miguel Hidalgo y el de la Secretaría de Relaciones Exteriores; así como, en los estacionamientos “A”, “X”, y “Z”.

Se reforzaron 30 edificios todos los tipos 9C, 5 I, 5L, 3M, 4N y 4K.

Lo anterior es un extracto de la conversación que sostuvimos con Guillermo, la cual le agradecemos mucho y quedamos en continuar platicando en próximas ocasiones.

lunes, 17 de octubre de 2011

Ing. David Velasco Pérez: “Participé en la construcción de ocho edificios en Tlatelolco”


Por Antonio Fonseca

El ingeniero David Velasco Pérez nace el 8 de febrero de 1925; en la calle de Aztecas de la colonia Morelos. Ingresa a la UNAM en 1948 para estudiar ingeniería civil, participa en la construcción de la Unidad Tlatelolco con la compañía ECSA  (Estructuras y Cimentaciones SA). En los edificios Guadalupe Victoria, Pedro Moreno, Corregidora, Ignacio López Rayón y Francisco Primo Verdad. Durante el gobierno del exPresidente López Mateos, recuerda que en esta primera etapa, es decir cuando se construyó la primera sección había mucha supervisión. En la segunda sección participó en la construcción del Leandro Valle, Batallón de San Patricio y Antonio Rosales. También vivió en Tlatelolco, en el edificio Santos Degollado.

Ing. David Velazco Pérez

P. ¿Cómo recuerda el inicio de la construcción de la Unidad?


R. Al principio eran solo cuatro compañías; cada una con 3 edificios, al principio estábamos a prueba; Toluca, Hermanos Álvarez Ordoñez, ECSA (Estructuras y Cimentaciones SA) filial de ICA. A la compañía CIR Construcciones, le dieron la Torre Insignia, también conocida como el edificio de Banobras. Hay muchos vicios ocultos en algunos edificios. Donde hoy se encuentra el edificio del Sindicato de Hacienda se encontraba la instalación provisional de CARSA (Concretos de Alta Resistencia); ahí se trabajaba el cemento y se surtía a todas las empresas constructoras.


¿Recuerda quien construyó el edificio Nuevo León?


El nombre del Residente de obra que construyó el Edificio Nuevo León, fue un Ing. Montellanos, ...cuyo nombre no recuerdo.


Existen muchos vicios ocultos en algunos edificios -recalcó el ingeniero-; como el número de estribos de las columnas; conforme a las diversas especificaciones según la carga y la altura de las mismas. Por ejemplo, el diámetro de columna, varilla o número de varillas. Yo lo pude confirmar en la revisión que hice después del terremoto en el Edificio Ignacio Manuel Altamirano; porque se dan casos, que a veces, se cuelan ingenieros irresponsables.

¿Los edificios de Tlatelolco se construyeron originalmente muy ligeros?

R. Se utilizaron materiales muy ligeros en los pisos, la marcolita y las paredes muy delgadas de 10 cms., de grueso reduciendo la privacidad en los edificios tipo A, que fueron los que yo construí.

Esto es solo un extracto de la plática que fue, por demás, muy amena. A lo lejos se escucha el murmullo de las conversaciones de los parroquianos, es la hora de la comida.




El 68 tlatelolca

Por Luis Arellano Mora/ Especial para Vivir en Tlatelolco

Tanquetas en los accesos a la Unidad un día después




u

n aspecto poco explorado en el análisis del curso de los acontecimientos del 68 mexicano es la vinculación del movimiento estudiantil con la incipiente organización de los residentes de la Unidad Habitacional Tlatelolco, fuertemente establecida por la ubicación de la Vocacional 7 en la zona, lo que catalizó el temor del gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, si se toman en cuenta cuatro factores: la historia de represiones gubernamentales contra estudiantes desde mediados del siglo pasado1, la voluntad de resistencia de los politécnicos, la expansión de la guerrilla urbana en América Latina y la construcción de Ciudad Tlatelolco como medida de contención de las demandas sociales de la guerra fría, particularmente de la Revolución Cubana.

Si un año antes, el 16 de mayo, la intervención militar en la Universidad Autónoma de Sonora rompió el nexo solidario entre alumnos y maestros e impidió la solidaridad de la juventud con los movimientos populares, el 2 de octubre se buscó sofocar la escalada de las revueltas estudiantiles a una rebelión urbana incontrolable.2

Lo visualizó de alguna forma la antropóloga Mercedes Olivera de Vázquez en su testimonio proporcionado para La noche de Tlatelolco: “Imagínate lo que hubiera sucedido si realmente la Unidad Tlatelolco llega a consolidarse como un núcleo de rebeldía, digamos un centro de guerrilla urbana. No estábamos en condiciones para que eso sucediera, pero quizá el gobierno lo pensó así y decidió acabar con ello. El gobierno estaba perfectamente enterado de la participación efectiva del pueblo, ya no de un grupo estudiantil con relaciones de trabajo o de estudio, como puede ser la Universidad o el Politécnico, sino un grupo de la población de México que estaba apoyando como tal a un movimiento de estudiantes. Por eso alego que el gobierno eligió perfectamente el lugar para descabezar el Movimiento. Nosotros caímos en la ratonera más perfecta…”.3

Lo anterior lo constató años más tarde, en 2008, líder estudiantil del plantel 7 del Instituto Politécnico Nacional, en declaraciones a Milenio Diario: “…a nosotros no nos agarró desprevenidos (el movimiento del 68). Fue simple darle cauce a la efervescencia estudiantil que ya tenía la escuela. Nuestra estructura organizativa permitió, los primeros días, dar orden y coordinación al remolino de iniciativas y acciones de los estudiantes.… La ubicación de la Voca era privilegiada, junto a la Plaza de las Tres Culturas. Igual de importantes (es) que los ciudadanos de Tlatelolco se fusionaron con nosotros, nos brindaron protección, nos abrían las puertas de sus departamentos cuando nos atacaban los grupos represivos”.4

El 3 de octubre continuaban los arrestos
La respuesta del régimen fue contundente: la represión del mitin aquella tarde del 2 de octubre y la erradicación de las escuelas 7 y la Prevocacional del IPN. Incluso el Gran Castigo comprendió la imposición de un virtual estado de sitio en la Unidad durante cerca de un mes, la suspensión de los trabajos arqueológicos y la cancelación del Museo del Anáhuac que se tenía proyectado edificar en el sitio que ocupa el claustro del templo de Santiago.

Y es que desde la Conferencia de Punta del Este, Uruguay, había permanecido en el gobierno mexicano como espada de Damocles la profecía del Che en la que Ernesto Guevara anticipaba una ola de movimientos populares ante el fracaso de la Alianza para el Progreso que impulsó el gobierno de John F. Kennedy, el cual incluía un programa de contrainsurgencia para América Latina “destinado a esterilizar el ejemplo de la Revolución Cubana” y de cuyos recursos financieros se proveyeron para la edificación del moderno conjunto urbano en Tlatelolco. Curiosamente, el 8 de octubre de 1968 se cumpliría el primer aniversario del asesinato del guerrillero en la sierra boliviana, lo que puso más nerviosos a los gobiernos latinoamericanos por una eventual efervescencia de guerrillas urbanas, como la de los Tupamaros en Uruguay y la de los Montoneros en Argentina.

Vitual estado de sitio, aunque se negó oficialmente
Parecerá una exageración subrayar la preocupación que representaba precisamente el nexo entre la organización vecinal tlatelolca y el movimiento de estudiantes, pero lo anterior lo vino a confirmar, aunque póstumamente, el mismísimo Marcelino García Barragán, entonces secretario de la Defensa Nacional, en los documentos que le legó y que reveló el periodista Julio Scherer en su Parte de Guerra. Tlatelolco 1968.

Sobre los sucesos de aquel año, el general imaginó un encuentro con reporteros; en la respuesta a la pregunta que él mismo se hace sobre si existió alguna animadversión “en contra del gobierno por parte de algunos sectores de la población del conjunto habitacional de Tlatelolco” se autorresponde: “Sí. Los habitantes de Tlatelolco estaban predispuestos contra el gobierno, en primer lugar por las repetidas veces que terroristas habían ametrallado la Vocacional 7, poniendo en peligro la vida de los habitantes de dicha unidad”.

En el fondo, los sucesivos gobiernos del partido dominante, el Revolucionario Institucional (PRI), tendrían motivos para temer, no a “la gran conjura” que alucinaban, sino al potencialidad que representaba la organización de los vecinos de Tlatelolco, lo que vendría a constatarse ante los sismos de 1985, cuando se dio una respuesta rápida de los residentes a la emergencia de la población afectada.


Notas

1. Carrión, Jorge, citado por Raquel Tibol en “Jorge Carrión: Contrarrevolución educativa y represión”, Revista Proceso No. 1820, 18 de septiembre de 2011, pp. 63, 64 y 65.
2. Monsiváis, Carlos: “El 68, las ceremonias del agravio y la memoria”, en Parte de Guerra. Tlatelolco 1968; Julio Scherer García y Carlos Monsiváis; Ed. Aguilar/Nuevo Siglo, 1999, p.226.
3. Poniatowska, Elena: La noche de Tlatelolco. Ediciones Era (2006), pp. 92 y 93.
4. Hernández, Rogelio: “Arrebatamos la Voca 7 al porrismo: Corpofóro”. Milenio Diario, 18 de noviembre de 2008.

domingo, 16 de octubre de 2011

Tratado de Tlatelolco y la Plaza de las Américas


Miguel Ángel Márez Tapia* 

En las siguientes palabras tengo la intención de esbozar brevemente otro aspecto importante sobre lo que representa vivir en Tlatelolco, por ello nos introduciremos en unos de los hechos más trascendentes que traspasaron nuestras fronteras y también es parte esencial de lo acontecido a lo largo de la historia de nuestra unidad habitacional.

Como ya sabemos, el Conjunto habitacional fue construido dentro de un contexto geopolítico regional muy complejo, nuestro compañero el Arq. Santiago Jordá, hizo mención en una de sus colaboraciones sobre la Alianza para el Progreso (ALPRO), un programa internacional de ayuda económica y social por parte del gobierno norteamericano de John F. Kennedy a países latinoamericanos, uno de ellos México. El resultado fue la construcción de dos unidades habitacionales, la John F. Kennedy en Balbuena y el Conjunto Urbano Presidente Adolfo López Mateos en Nonoalco Tlatelolco.

Los trece días de la crisis de misiles en octubre de 1962, cuando se estuvo al borde una guerra nuclear entre Estados Unidos y la URSS en suelo cubano, mostró la vulnerabilidad de la región latinoamericana respecto a los intereses de las superpotencias enconadas en la llamada “Guerra fría”; el nombre de Tlatelolco tuvo un importante papel a través de la respuesta de países latinoamericanos respecto a este tema, López Mateos tiene la iniciativa de pactar un acuerdo con líderes de otras naciones de la región para realizar, en primera instancia, la Declaración Conjunta sobre Desnuclearización de América Latina el 29 de abril de 1963.


Al tomar la decisión que Tlatelolco albergaría la nueva cancillería, la construcción de la unidad estuvo inmersa en estas negociaciones internacionales, aquí es relevante la figura de Alfonso García Robles (premio nobel de la paz en 1982) que tuvo la encomienda de ser el representante de nuestro país en esas reuniones. Al mismo tiempo, Tlatelolco representó la máxima obra en el sexenio de López Mateos, en ella se introdujo toda la ideología del Estado para legitimar su poder.
Alfonso García Robles (Premio nobel de la paz, 1982)

Reflexiónelo un instante, Tlatelolco no sólo representaba la historia sino también simbolizaba al país, las secciones se llamaban “La Independencia”, “La Reforma” y “La República” respectivamente, eso esbozaba la intención del gobierno mexicano en darle al proyecto un toque nacionalista y legitimización de su propia gestión. Esto implicó una tensión constante porque la élite que gobernaba nuestro país deseaba ser partícipe de la opulencia simbolizada en Tlatelolco.

López Mateos le pone su nombre al Conjunto Urbano, inaugurándolo oficialmente el 21 de noviembre de 1964 a sólo nueve días de terminar su gestión, convirtiéndose así, en la última obra de gran magnitud de su sexenio, una característica que quiso acuñarle al proyecto fue la dimensión cultural, introdujo la noción sobre las Tres Culturas y su plaza monumental enmarcada en los tres momentos históricos petrificados (la pirámide, el templo y el edificio), tres formas de edificación del poder hegemónico.

Se tiene conocimiento que la historia de nuestro país se escribe cada sexenio, Tlatelolco no estaría exento de este fenómeno, el 1 de diciembre de 1964 toma posesión Gustavo Díaz Ordaz y su mirada cambiaría el rumbo del Conjunto, el nuevo presidente intentaría ser parte del proyecto, derogando los decretos que su antecesor había dejado encomendados; primero le borró el nombre de quién ocupó la silla anteriormente impulsando el nombre comercial de Ciudad Tlatelolco, otra modificación importante fue la eliminación del proyecto de museo de sitio en la zona arqueológica y el museo de la Aduana del pulque, en vez de priorizar a la unidad habitacional con un centro irradiador de cultura en la zona norte de la ciudad de México. Díaz Ordaz tuvo la intención de convertir a Tlatelolco en el centro de la negociación geopolítica, convirtiéndolo en el corazón de América Latina.
Un basamento que soporta 32 mástiles organizado en tres hileras
 a un lado del edificio 15 de septiembre, 
en donde se colocaron las banderas de los países participantes

Las Tres Culturas eran insuficientes para la mirada del nuevo gobierno, esto implicaba ampliar la escala de la plaza monumental erigida en Tlatelolco, Díaz Ordaz dio mucho peso a la política exterior, así se entiende, cuando dejó bajo el resguardo de la Secretaría de Relaciones Exteriores, el antiguo convento de Tlatelolco y la Aduana, a manera de consolidar la imagen de una nación pujante y líder en América Latina, a fin que le sirviera de soporte político para mantener un diálogo más directo con Estados Unidos.

Esa es la razón por la que se intentó rebautizar a este sitio como la Plaza de las Américas, para ello se utilizó una estructura en el lado norte de la plaza mandada hacer ex profeso, un basamento que soporta 32 mástiles organizado en tres hileras a un lado del edificio 15 de septiembre, en donde se colocaron las banderas de los países participantes, junto con el lábaro patrio situado en el mástil principal localizado en la zona oriente a un costado del edificio Chihuahua. Treinta y tres países suscribieron el Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y el Caribe, mejor conocido como Tratado de Tlatelolco en la antigua cancillería (hoy Centro Cultural Universitario de la UNAM), esto significó concretar un acuerdo geopolítico de grandes dimensiones para la no construcción ni proliferación de armas nucleares en América Latina el 14 de febrero de 1967, el primero de su tipo en todo el mundo.

Hoy en día, este suceso preferentemente se recuerda en el momento que se construyó en 1991, el Jardín de Médicos por la Paz, lugar en donde los monumentos, la pequeña plaza, los cinco continentes simbolizados en las jardineras y el ágora son elementos centrales de lo que ha acontecido en Tlatelolco, memoria que no debe dejarse de un lado, patrimonio no únicamente de los tlatelolcas, sino más allá de nuestras fronteras.

*Antropólogo

sábado, 15 de octubre de 2011

A 25 años de la reconstrucción de Tlatelolco, tiene futuro

Por Antonio Fonseca


Ing. Sergio González Karg, Lic Manuel Camacho Sólis y Arq. Santiago Jordá Salazar

En la conferencia realizada el pasado 5 de octubre en el Centro Cultural Tlatelolco Universitario-UNAM, él Ing. Sergio González Karg relató cómo se rescataron diez mil quinientos departamentos; siendo esta, la primera obra de ingeniería de este tipo en México. Donde, se realizó la reparación menor en 60 edificios y mayor en 30 inmuebles, siendo sometidos a demolición 12 edificios. Todo ello, coordinado por él mismo, cuando fue vocal ejecutivo del PRENT*.

Tlatelolco fue diseñado para albergar a 70 mil habitantes en 11, 920 departamentos, se dice que llegó a tener 100 mil habitantes, antes de los sismos del 85. Existen fuentes que estiman que dicha cifra probablemente era superior a 120 mil. Este exceso de población se debió al fenómeno social denominado “familias desdobladas”; es decir, dos o más familias viviendo en un mismo departamento. Y también debido al hacinamiento en los 2,544 cuartos de azotea existentes en algunos edificios del conjunto urbano; ocupados por personas de bajos recursos económicos.

En dicha conferencia el Ing. González Karg comento:

“Reconstruir Tlatelolco implicó realizar una síntesis de conocimientos y experiencia en materia de ingeniería sísmica, diseño de estructuras y adaptación de técnicas de construcción entre otras disciplinas, además de amalgamar a ella la experiencia de otros países.”

Y asimismo, agregó: “Para saber la resistencia de los inmuebles a un movimiento sísmico, a todos los edificios de Tlatelolco se les hicieron pruebas de tracción que nos permitió determinar el movimiento de los ejes, y en torsión y, todos resultaron dentro de los parámetros”.

“En los 46 edificios tipo ‘A’ y 14 ‘B’ se realizaron las reparaciones menores en áreas comunes de los inmuebles, reubicación de lastre y limpieza de celdas de cimentación, así como el remozamiento externo de azoteas y patios.”

El ingeniero Karg señaló que: “restituir los edificios de Tlatelolco fue una obra de gigantes y la calificó de proeza técnica. Señaló que la reconstrucción se realizó conservando las inclinaciones que tenían los edificios después de 1985. Los edificios no tienen problema porque se encuentran flotando en la ciudad como si fueran barcos. Tlatelolco es un lugar más seguro que antes de 1985 y lo será por muchos años más, Tlatelolco llegó para quedarse, tienen sus edificios una vida útil por lo menos 100 años.”

“En efecto, la reconstrucción le ha devuelto a los edificios de Tlatelolco sus condiciones de habitabilidad y estabilidad, convirtiéndolo en un lugar más seguro para vivir. El concreto en recimentaciones y reestructuraciones constituyen un factor de seguridad, pero además da a las fachadas de los edificios una nueva imagen arquitectónica con sus trabes, macromarcos y contrafuertes. Imagen que con pinceladas de color proclama que Tlatelolco es un buen lugar para vivir.”

El destacado González Karg hizo mucho énfasis en lo referente al mantenimiento de los edificios: “No entiendo porque si todos nos bañamos, nos hacemos chequeos médicos para estar bien, ¿Por qué pensamos que los edificios no lo necesitan? ¿Por qué la gente no cree en el mantenimiento? A la restructuración de los edificios debe seguir la restructuración de las mentes, se requiere un cambio que los vecinos se organicen para cuidar sus edificios”.

Por último, en la sesión de preguntas, vecinos del Edificio Arteaga, asentaron que en estos días la Delegación Cuauhtémoc está abriendo columnas en el edificio para sacar corazones y que habían roto una varilla. Ante este hecho, le preguntaron al supervisor, y éste conestó desconocer el suceso. Dichos residentes se percataron que están trabajando sin planos del edificio, ni con la memoria de cálculo.

Ellos comentaron al respecto: “Es como si un doctor a un paciente que no habla, dice: ábranlo y si no tiene nada ciérrenlo, en lugar de hacer otros estudios que deben realizarse. No sabemos para qué están haciendo esto; y también, lo están haciendo en otros edificios”.

A lo cual el Ing. González Karg, respondió: “No se deben hacer pruebas destructivas, esto de sacar corazones no es necesario, hay otras pruebas no destructivas; hay aparatos que pueden usarse. Ustedes tienen que estar unidos para ver todo lo que ocurra con sus edificios. El futuro está en manos de los tlatelolcas”.


* Programa de Reconstrucción en Nonoalco Tlatelolco.





viernes, 14 de octubre de 2011

A 25 años de su remodelación Tlatelolco tiene futuro

Plaza de las Tres Culturas 2011
“A 25 años de su remodelación, Tlatelolco, con vida para otro siglo” fueron las palabras rescatadas por el periodista Israel Navarro de Diario Milenio sobre la conferencia que pudimos compartir con el Ing. Sergio González Karg, nombrado vocal ejecutivo del Programa de Reconstrucción de Nonoalco Tlatelolco (PRENT) hace 26 años por el Lic. Manuel Camacho Solís, secretario de la Secretaria de Desarrollo Urbano y Ecología (SEDUE). Gracias a su experiencia, carácter y capacidad de organización, logró recuperar 32 de los 40 edificios, lo que llamó una “proeza técnica” del momento, ya que el anterior Secretario de SEDUE, el Ing. Guillermo Carrillo Arena, los había condenado a ser demolidos.

El auditorio “Alfonso García Robles” del Centro Cultural Universitario Tlatelolco que gentilmente abrió sus puertas, y los tlatelolcas lo llenaron a plenitud, fue el marco donde González Karg logró con sus explicaciones sobre la reconstrucción de los edificios en 1986, dar a los vecinos seguridad y confianza sobre sus departamentos. Las autoridades de la Delegación Cuauhtémoc y de la Dirección Territorial no asistieron a pesar de haber sido invitados, al parecer no fue de interés para ellos.

La conferencia de González Karg terminó con el siguiente llamamiento a la comunidad:

“La comunidad tlatelolca debe asimilar lo obtenido con la reconstrucción de la unidad y a la par establecer programas con las autoridades correspondientes para que no se vuelvan a repetir los errores pasados. Ahora se tiene la visión más amplia, se debe enfocar a un mantenimiento preventivo y no correctivo, ya que poseen los manuales que les ha dado el programa para cada uno de los edificios para su mejor conservación”. EL FUTURO ESTA EN MANOS DE LOS TLATELOLCAS

Con este evento damos por terminado los festejos del 4º aniversario de nuestra publicación que tiene el único interés de informar a la comunidad sobre la problemática que vive nuestra Unidad.

Las Coaliciones

jueves, 13 de octubre de 2011

Próximo número


¿Cuál es la virtud que reconoces en tu papá? Taller de "Plan de Vida" para jóvenes en Tlatelolco

Por: Trabajador Social José Juan Reyes Montemayor

Taller de "Plan de vida"

“La familia siempre ha sufrido cambios paralelos a los cambios de la sociedad. Se ha hecho cargo y ha abandonado las funciones de proteger y socializar a sus miembros como respuesta a las necesidades de la cultura. En ese sentido, las funciones de la familia sirven a dos objetivos distintos. Uno es interno —la protección psico-social de sus miembros; el otro es externo —la acomodación a una cultura y la transmisión de esa cultura.”
En el “Taller de Plan de Vida” encontramos datos interesantes que impactan a los jóvenes, por ejemplo el 56% quieren terminar sus estudios o realizar una licenciatura, 20% quiere tener una casa y formalizar una familia, 16% desea viajar a otro país y 8% ya están trabajando. De los jóvenes que desean viajar a otro país el 75% son hombres y los que ya están trabajando el 75% son mujeres.

El “Taller de Plan de Vida” pretende brindar información y orientación para focalizar los objetivos personales a corto, mediano y largo plazo, gestionando estrategias de acuerdo a las 10 habilidades para la vida propuestas por la Organización Mundial de Salud, logrando un comportamiento social efectivo, es decir, cumplir sus metas respetando los Derechos Humanos.

Por esta razón creo prudente escuchar lo que piensan los jóvenes en temas específicos como la siguiente pregunta:

¿CUÁL ES LA VIRTUD QUE RECONOCES EN TU PAPÁ?

La nota completa puedes consultarla en www.vivirentlatelolco.com.mx
proximamente en la sección Notas.