miércoles, 12 de marzo de 2014

50 Aniversario de Tlatelolco: los sentidos de una conmemoración

Aurelio Cuevas (Sociólogo)



A medio siglo de haberse fundado esta Unidad Habitacional es un momento propicio para realizar una reflexión sobre el significado de “vivir en esta ciudad dentro de la ciudad”;tal ejercicio abarca una diversidad de aspectos sobre lo que fue -y en alguna forma sigue siendo- un modelo de modernización urbana no superado por ningún otro proyecto de índole similar habido en la ciudad de México. En este sentido interesa destacar ciertos aspectos relacionados con la singularidad de Tlatelolco en la vida de la capital desde la segunda parte del siglo XX.

El Tlatelolco actual surgió como un proyecto de cambio del rostro de la ciudad al reunir en un territorio relativamente reducido (alrededor de 1 km. cuadrado) miles de viviendas verticales con un equipamiento integral de servicios públicos: escuelas, áreas de juego, comercios, amplias zonas verdes, centros recolectores de basura, etc. Tales características representaron en su tiempo una innovación en la calidad de vida de un importante sector social en la gran metrópoli.

En las décadas posteriores la vivienda vertical siguió proliferando en los cuatro puntos cardinales del medio defeño, modificando la forma de vida de una extensa población: creciente privacidad y anonimato, moradas reducidas y uniformes, uso del automóvil particular, introducción de la vigilancia privada, etc. Como contraparte a tales “desarrollos habitacionales” el trazo urbano de Tlatelolco se caracterizó por guardarun equilibrio entre las necesidades de vivienda con el goce de los espacios abiertos.

Otra característica singular del Tlatelolco moderno fue la edificación de vivienda para diferentes sectores sociales (desde los que percibían ingresos relativamente modestos como los burócratas públicos, hasta aquellos con solvencia económica elevada, como los profesionistas independientes), lo cual acrecentó notoriamente la presencia de la clase media en la capital. Posteriormenteenla ciudad de México predominaron los proyectos de viviendas para grupos restringidos (con ingresos bajos), o bien para “gente selecta” (lo que se llama gentrificación de la ciudad).

Pero el laboratorio tal vez más significativo de esta Unidad Habitacional ha sido la presencia de importantes experiencias colectivas: el movimiento estudiantil de 1968, la auto administración vecinal de los años 70´s, la reconstrucción tras el sismo de 1985, podrían considerarse las más relevantes. Evaluar el medio siglo de existencia del Tlatelolco moderno implica, entre otras cosas, el rescate de la memoria local acerca de la relación entre gobernantes y gobernados. Tal iniciativa solo es posiblea través de un debate horizontal y plural entre los grupos de vecinos organizados en torno deciertos temas centrales: la obra pública, el control administrativo y los proyectos de financiación en la zona.

Pensar el Tlatelolco de los años venideros implica considerar si aún puede ser consistente como un proyecto de integración social en una metrópoli que, con el paso de los años, se ha hecho más grande, más compleja y…más ingobernable. En este último sentido los consejos de vecinos, redes participativas o grupos comunitarios existentes en la zona pueden ser canales de expresión ciudadana directa que impulsen cambios democráticos profundos en la vida de la capital. 

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